Archivo. Entrevista realizada en marzo de 2010 con motivo del año sacerdotal. Ricardo Latorre Cañizares es un sacerdote español, del Instituto Secular Servi Trinitatis, vicario de la Cátedral de Santa Rosa, La Pampa.
RESUMEN DE LA ENTREVISTA
Ricardo Latorre: un joven español que escucha el llamado de Dios a la vida sacerdotal
"Yo creo que la vocación tiene su origen en el corazón de Dios, en su mente, que ya cuando crea a una persona tiene su proyecto... y la cuestión está en cómo uno mismo va descubriendo que Dios lo quiere para él, para una determinada misión. En la medida en que la persona tiene la posibilidad de vivir una vida en la verdad, con un orden moral, lo va descubriendo... Fue como una fruta madura que cae de su peso, de ir viviendo e ir descubriendo día a día qué es lo que merece la pena..., ir viendo cada vez más claro que mi vida la tenía que vivir para el Señor, para las almas, pensando en la Vida Eterna... "
Los años de seminario y la vocación misionera
"Yo siempre tuve el deseo en mi vocación de las misiones, de ir a otros lugares adonde la Iglesia necesitara más el trabajo de uno. Yo tengo un especial recuerdo positivo de los años de mi formación sacerdotal, porque tuve la gracia de tener profesores muy buenos, de categoría, tanto intelectual como moral, varios de ellos son obispos...: Don Demetrio Fernández, que ha sido nombrado para la diócesis de Córdoba, especialmente él; otros... que me han marcado, junto con mi formación en la Acción Católica, en España y en el Instituto Servi Trinitatis, donde he tenido los mejores ejemplos y una formación muy buena, muy fiel a la Iglesia, que me ha capacitado, humanamente hablando, para enfrentar distintas situaciones y distintos ambientes en que he vivido hasta ahora en mis 17 años de sacerdocio, primero en España, en un barrio del centro de la ciudad, y después en Santa Rosa (La Pampa, Argentina), en los distintos aspectos que Dios ha querido que trabaje: en los medios de comunicación o la defensa de la vida y luego lo que es la labor pastoral propiamente sacerdotal: los sacramentos, las confesiones, la atención a los enfermos..."
Libro "La cultura de la vida". Origen y mensaje principal en su contenido
"Es un libro muy particular. En primer lugar por la forma cómo surgió... En el contacto con la realidad, sobre todo con los chicos jóvenes, 16, 18, 20, me encontraba repetidamente con las mismas situaciones o muy parecidas de chicos o chicas desorientados, con la vida muy desencaminada, con muchísimos problemas fruto de la forma equivocada de ir orientándose en su vida... Así es que comencé a dar las charlas en colegios de Santa Rosa, después me llamaban también de la provincia... Fue un trabajo muy intenso, muy fuerte, yo creo que muy provechoso a nivel personal de los jóvenes, y a nivel de crear también en La Pampa una conciencia por la vida, que luego ha dado sus frutos.
Las charlas se orientaban a dar... "la lógica de la vida, que los jóvenes piensen un poquito más allá de los diez minutos siguientes, que proyecten un poco su vida, y que vean y hagan una opción, que es lo que quieren sembrar..., cosechar con sentido común. Mirando la realidad desde la fe uno ve todavía más y mejor las cosas, pero desde el punto de vista simplemente humano. Era tal el empleo de tiempo... Entonces el P.Antonio me sugirió `por que no escribes un libro con las mismas cosas que das en la charla´... Y el libro prácticamente es, digamos, tiene como el esquema de la charla hablada, que luego lo fui adaptando gracias al sacrificio del P.Antonio, que me tomaba mis horarios a veces de confesiones para que yo me pudiera dedicar... Fue en el año 2000 cuando salió la primera edición. Ha tenido varias ediciones, tanto aquí en Argentina como en España... Si Dios quiere va a salir publicado otra vez. Creo que ha hecho mucho bien. Son muchos los testimonios de personas, también adultos, pero sobre todo jóvenes, que me dicen que les ha servido mucho para ver la vida con más claridad y tomar con más decisión que es lo que uno quiere y adonde quiere encaminar sus pasos..."
Causas de la persecución sufrida en Santa Rosa, La Pampa
La persecución, "en nuestro caso ha sido una cosa llevadera, desde el punto de vista que prácticamente eran algunos medios repetidos por otros exclusivamente, porque la gente nos ha apoyado en todo momento: los sacerdotes de la diócesis, los obispos, tanto el que salía como el que entraba; el nuncio del Santo Padre aquí en Argentina, hemos tenido un apoyo en todo momento de los medios de comunicación: Cristo Hoy, AICA, Eclesia, la Cadena Mariana de la Fe, que son como 50 emisoras... nos han apoyado mucho. Hemos estado muy protegidos por la Iglesia. Gracias a Dios... las mentiras estaban como muy a la vista. No podían llegar muy lejos... Esto tiene su explicación: el que sigue a Cristo sabe que va a ser perseguido y no nos tiene que extrañar. Al contrario, animarnos más, como dice Jesús: `alégrense cuando los persigan, porque también persiguieron a los profetas, y regocíjense porque la recompensa será grande en el cielo´, o sea que nos hicieron un gran favor, nos han hecho un gran honor. Humanamente yo le veo varias explicaciones, ya que estas van tocando el tema de la vida... Cuento los hechos objetivamente. Cada cual que saque sus conclusiones... En la provincia de La Pampa, creo que tendrán conocimiento, porque fue noticia nacional e internacional, aprobaron la ley del aborto en la Legislatura provincial, la cual entraba en vigor cuando era firmada. Si no la firmaba el gobernador, a los 10 días, automáticamente entraba en vigor. Luego no firmaron la ley. Nosotros como iglesia, la labor que hacíamos por la vida, la acentuamos en nuestra protesta, nuestra indignación, porque se aprobaba una ley de ese tipo,... la ley dejaba a los niños sin protección, para que cualquiera los pueda matar. Nos parecía una barbaridad. Hablamos con las personas que pudimos hablar, tratando de hacer ver las cosas, movilizamos al pueblo que estaba sensibilizado en gran parte a favor de la vida y eso produjo que el gobernador no sólo no firmara la ley sino que la vetara... La ley volvió a la legislatura. También los mismos legisladores... votaron... en contra de la ley, con lo cual quedó anulada. Eso provocó la ira y la rabia de los abortistas que, enfurecidos aquel día de la votación, lanzaron unas amenazas... contra los curas... en diciembre de 2007... 5 meses después, en mayo de 2008, fue donde comienzan a decir cosas de nosotros... La gente que nos conoce, en ningún momento dudó... De forma especial este tipo de cosas tenemos que mirarlas desde la fe como creyentes... No nos tiene que desanimar en absoluto, al contrario, ver que este es el camino..., no asustarnos y seguir en la misma línea de trabajo: trabajar con la juventud, trabajar con la verdad, enfrentar el mal sin miedo, con los medios que Dios nos ha dado que son la palabra y la verdad; con caridad y con la verdad y después a sufrir lo que venga. Sabemos que el triunfo es de Cristo, que lo crucificaron y resucitó. Él además no nos deja sufrir demasiado porque enseguida sale en nuestra defensa... Hay que seguir adelante confiando en Dios, que ha vencido a la muerte... y mucho agradecimiento por parte de todas las personas que han estado en los momentos... que lo hemos necesitado..."
El silencio prudente ante la calumnia
"... Esta cruz que Dios permitió que lleváramos durante unos meses, tenía sus crucecitas dentro y una de esas es el no contestar, porque era tal la indignación que producía a veces las cosas que decían, eran tan fáciles de rebatir, de decir `esto no puede ser verdad, usted está mintiendo, todo el mundo se puede dar cuenta...´ Sin embargo nosotros guardamos silencio, a veces, mordiéndonos la lengua, porque era muy indignante, demasiado absurdo, porque así nos lo indicaron los abogados, que nos aconsejaban no decir nada... No entrar al juego de los medios, que era siempre a la larga peor, porque ellos buscaban más el enfrentamiento... Dejar que dijeran lo que quisieran y nosotros en las instancias oportunas aclarar las cosas y poner de manifiesto la falsedad de las acusaciones. Así lo hemos hecho. por supuesto ha quedado aclarado y sí fue un sufrimiento para nosotros... a veces no salir públicamente a decir las cosas pero fue porque así nos lo aconsejaron y a nosotros nos pareció prudente..., y sufrir como Cristo, en silencio, y sobre todo, no dejándonos amedrentar, sino seguir adelante..."
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