25 ene 2014

OPINIÓN. Jesús, sucesor de Juan Bautista


Fray Tuk. El mensaje inaugural de la predicación de Jesús es idéntico al del Bautista: "Convertíos porque el Reino de los Cielos está cerca". Mateo 4, 12-23.



Mc 1, 2 llama a Juan Bautista ‘ángel (ἄγγελος) de Dios’, no en el sentido específico de ‘espíritu puro’, sino en el sentido genérico de ‘enviado de Dios’. Eso es lo que significa la palabra ‘angel’: ‘enviado’. Después de su Bautismo, Jesús se fue al desierto, donde estaba Juan Bautista con sus discípulos. Mt 4, 11 dice que allí unos ángeles (ἄγγελοι) le servían o, dicho de otro modo, eran sus diáconos (διακονέω). ¿Quiénes eran estos “ángeles”? ¿Seres espirituales? ¿O más bien Juan Bautista o/y algunos de sus discípulos? Jn 1, 37ss narra, de hecho, cómo dos discípulos del Bautista siguieron a Jesús: Juan y Andrés. Lo que es cierto es que Jesús no inaugura su ministerio público hasta que no desaparece de la escena Juan Bautista. Jesús comienza (ἄρχω) a predicar (κηρύσσω) justo después de que encarcelaran al Bautista.

Son significativas las coincidencias entre el ministerio de Jesús y el de Juan Bautista:

- La tarea principal de ambos entre las gentes es predicar (κηρύσσω).

- El mensaje fundamental de ambos, según lo resume Mateo, es idéntico: Cambiad de mentalidad, porque el Reino de los Cielos está al alcance (Μετανοεῖτε, ἤγγικεν γὰρ ἡ βασιλεία τῶν οὐρανῶν) (3, 2; 4, 17).

- Al menos dos de los discípulos del Bautista siguen a Jesús: Juan y Andrés. Por eso, cuando Jesús, paseando junto al mar, llama a Pedro, a Andrés, a Santiago y a Juan, no llama a desconocidos sin preparación, sino que elige a aquellos que habían sido discípulos del Bautista, preparados personalmente por él para recibir el Reino de Dios y a Su Mesías.

Jesús, por tanto, continúa claramente la tarea de Juan Bautista de preparar al pueblo de Israel para recibir el Reino de los Cielos. Sin embargo, se comienzan a vislumbrar las diferencias:

- Jesús asigna a sus discípulos una misión inédita: Ser pescadores de hombres.

- Jesús no se queda predicando en el desierto, sino que se hace presente en las sinagogas, el lugar de oración y meditación de la Palabra de Dios de los judíos.

- Jesús no sólo es predicador. También es terapeuta (θεραπεύω): cura toda enfermedad y dolencia.

@fraytuk

Publicado en Certeza católica.
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