12 jun 2010

Ordenando ideas sobre el gaymonio. II


OPINIÓN. Fray Tuk. No es lo mismo ser homosexual que ser homosexualista. Homosexual es la persona a quien le atraen individuos del mismo sexo. Homosexualista es la persona, homosexual o no, que milita activamente por imponer en la sociedad modelos homosexuales, con un ataque virulento a la familia natural y al cristianismo. He escuchado a varios homosexuales manifestar el "asco" (sic) que le producen los homosexualistas. Quien quiera defender los verdaderos derechos del homosexual, que lo defienda de la "dictadura" gay. Pasemos a describir con más detalle al activista homosexualista.

 - Se constituye a sí mismo en representante de todos los homosexuales. Sin ningún título que le otorgue derecho para ello, el homosexualista habla como si fuese portavoz de todos los homosexuales. Nada más lejos de la realidad. Sin embargo, con su prepotencia y agresividad discriminatoria, el homosexualista "extorsiona" a los homosexuales, imponiéndoles el perfil de comportamiento (orgullo histriónico y anticristiano); y el ideario militante gay (matrimonio homosexual, adopción de hijos...). Consecuentemente, hostigan a los homosexuales  que están en contra del gaymonio, o a quienes dicen que quieren recuperarse, y más aún a los que pasan a la heterosexualidad. El caso de Michael Glatze es sólo un ejemplo, y muy elocuente.

- Está avalado por los principales poderes políticos, mediáticos y económicos. Como ejemplo servirá recordar que Obama volvió a declarar el mes de junio como "el mes del orgullo Lésbico, Gay, Bisexual y Transgénero" (¿por qué no dedica un mes a los matrimonios naturales?), y que los más importantes canales televisivos argentinos no paran de ridiculizar y casi criminalizar a quienes estén en contra del gaymonio (no pondré ningún enlace a los patéticos, repulsivos, de mal gusto y burlescos programas televisivos anti matrimonio natural).

- Dice que está discriminado, pero son los homosexualistas quienes discriminan a los que no piensen como ellos, especialmente a los cristianos. De los dos puntos anteriores se deriva el hecho de que sea tildado de homófobo todo el que no esté de acuerdo con los postulados homosexualistas. Sin embargo, los discriminadores son ellos: las marchas del orgullo gay son sinónimo de anticristianismo militante y agresividad discriminatoria.

- Propugna un adoctrinamiento infantil y una "inquisición" homosexualista. De las tres actitudes mencionadas, resulta el paso del victimismo a hacer víctimas de su inquisición gay a quienes no piensen como ellos. El caso de David Parker, papá y esposo encarcelado por intentar defender a su hijo Tony de 5 años del adoctrinamiento gay, es un ejemplo muy elocuente de la dictadura que se nos viene encima.

Repito: quien quiera defender los verdaderos derechos del homosexual, que los defienda de los abusos homosexualistas. Continuará...
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2 comentarios:

  1. Muy claro. Los cristianos debemos estar muy unidos en este punto fundamental: la familia como Dios la quiere está fundada en el matrimonio entre un hombre y una mujer. La doctrina de la Iglesia al respecto es bien clara.

    El gaymonio consiste en legalizar algo antinatural: que el Estado reconozca la unión de dos personas del mismo sexo, que no está orientada a la vida sino al mero egoísmo, y por tanto no puede ayudar a fundar la sociedad, sino a socavar sus cimientos.

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  2. Alpargata, etc12/6/10, 17:44

    homosexualista = gay = intolerante que quiere imponer sus "gustos" y que además le den premios por ello.

    Se hacen las víctimas y, a la vez, amenazan y revientan a quien se les cruce en su camino.

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