Fray Tuk. La relación sobre Europa del pasado Sínodo de los obispos corrió a cargo de Peter Erdo, arzobispo de Budapest. Constató la continuidad del proceso de descristianización desde la publicación del documento Ecclesia in Europa en 2003.
Mucha sinceridad demostró el cardenal Erdo al reconocer el aumento de la descristianización a pesar de las dos Asambleas especiales dedicadas a Europa por el Sínodo de los obispos (1991 y 1999), y de la exhortación apostólica Ecclesia in Europa (2003), que sirve de punto de referencia a la intervención del purpurado. Este realismo le lleva a analizar las causas de la "pérdida de la memoria y de la herencia cristiana" (EiE 7) y de la creciente "ignorancia acerca de la fe". Parece obvio que al tratar de la nueva evangelización hay que analizar qué factores operan contra la primera evangelización. Erdo se centra principalmente en la descripción de obstáculos extraeclesiales:
- Manipulación de los medios de comunicación de masa.
- Creciente estatalismo.
- Cristianofobia física, judicial y legislativa.
El arzobispo de Budapest concluye mencionando motivos de esperanza para la nueva evangelización.
Mis comentarios en cursiva.
Medios de comunicación.
- El primer factor negativo es la desinformación de la mayoría de los medios, pues "divulgan una presentación de la fe cristiana y de la historia que a veces abundan en calumnias, desinformando al público, ya sea sobre el contenido de nuestra fe o a propósito de la realidad de la Iglesia". Lamentablemente, no está de moda en la comunicación eclesial denunciar las calumnias y aclarar la desinformación de los medios. ¿Prudencia sobrenatural o carnal? Por otra parte, ¿por qué no tiene la Iglesia Católica medios tan o más pontentes de comunicación?
- El segundo efecto nocivo es la estupidización que provoca la "cultura audio-visual" al debilitar "los conceptos claros y el razonamiento lógico". Sólo así es posible, por ejemplo, que tantas personas estén a favor del horrendo crimen del aborto. Lo políticamente correcto anula la sana búsqueda racional de la verdad y el bien, por el burdo método del amedrantamiento y la discriminación.
- En tercer lugar, el cardenal Erdo recuerda la creciente manipulación por los políticos que cada vez se convencen más de que "es posible gobernar a la sociedad con los medios de comunicación de masa y la economía, renunciando completamente al derecho y la moralidad". Esto nos intruduce ya en el fenómeno del estatalismo.
Estatalismo.
- "En las escuelas públicas de muchos países es posible una enseñanza de la religión o de las religiones, pero no de la religión católica. Tal enseñanza de la religión, llamada neutral, sin embargo comporta más bien una educación al sincretismo o al indiferentismo". El problema añadido es cuando no hay un oportuno discernimiento por parte de las autoridades eclesiásticas de los maestros y profesores de religión católica, allí donde el estado los permite en la enseñanza pública. Entonces la poca altura pedagógica, cultural, o la falta de fidelidad al magisterio, es cuestión intraeclesial.
- "El estado de derecho se ha debilitado en los últimos años en varios países; la gente, frecuentemente, tiene la impresión de que la democracia tradicional está perdiendo su significado". Igual que la pax romana favoreció la expansión del cristianismo naciente, así el estado de derecho es el marco ideal para la nueva evangelización, mientras que la pérdida de libertades la perjudica seriamente.
Cristianofobia.
- Agresiones físicas. "El Observatorio europeo de cristianofobia registró muchos casos de discriminación y de violencia contra los cristianos en casi todos los países europeos". A mi juicio los medios de comunicación católicos deberían informar más y mejor de estos graves problemas.
- Agresiones judiciales. "Con no poca frecuencia los tribunales rechazan la ayuda a las víctimas cristianas de dichos ataques". Cuando esto sucede con otros colectivos no suelen actuar pasivamente en defensa de sus derechos reales o dudosos.
- Agresiones legislativas. "Hoy debemos constatar con preocupación el surgimiento de lo que se llaman 'derechos humanos de tercera y cuarta generación'. Ellos no tienen vínculos claros con la visión humana y cristiana del mundo, ni con la moralidad objetiva expresada también en las categorías del derecho natural... como si el hombre con las propias opiniones y deseos fuese independiente también con respecto a la realidad misma". No esperemos que ideólogos laicistas legislen en favor de la vida humana, de la libertad religiosa o de la familia, si los católicos no nos convertimos en ciudadanos activos que luchan por la promoción de leyes justas.
Motivos de esperanza.
- Eventos católicos multitudinarios. Destaca el fruto de las Jornadas Mundiales de la Juventud de Colonia y Madrid, los viajes apostólicos del Papa, y la iniciativa de las misiones ciudadanas. "Los efectos no son fugaces. En esas ocasiones diversos participantes han recibido hasta su vocación sacerdotal o religiosa".
- Nuevos carismas eclesiales. El cardenal aplaude el dinamismo de "algunos movimientos de espiritualidad... si logran evitar la tentación post moderna de conformarse con sentimientos y percepciones particulares", y del voluntariado caritativo parroquial.
- Servicio a la reconciliación. Por último, Erdo recuerda el "paciente servicio por parte de la Iglesia" frente a las "tensiones nacionales y étnicas"; y los pasos dados por el ecumenismo, principalmente en cuanto al "amplísimo consenso acerca de la familia y la vida, de los criterios de las relaciones entre Estado e Iglesia y la crisis económica", con las iglesias ortodoxas.
El cardenal Erdo concluyó con estas palabras: "¡Santa María, Madre de la Iglesia, ruega por nosotros!" Sinceramente, me llamó la atención que el presidente del CELAM no mencionase ni una sola vez a la Virgen María, estrella de la primera evangelización de América y fermento de primer orden para el catolicismo hodierno de aquellas tierras.
Texto completo de su intervención.
Publicado en Certeza católica.
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