OPINIÓN. Me pone enfermo

Gorrión. La diputada Ripoll espetó en un debate televisivo en C5N que lo que tiene en su seno la mujer embarazada no es un niño "ni nada de eso". Advierto desde el principio que me pone enfermo escuchar este tipo de debates por lo desastrosos que son: todos gritando a la vez, sin atender a razones, soltando tópicos y mentiras… Pero, sobre todo, tratando como opinable, lo que no lo es desde ningún punto de vista. Si no tenemos el mismo derecho a vivir todas las personas, cualquier otra injusticia puede ser justificada.

Nadie tiene derecho a matar a un inocente. Nunca y bajo ningún concepto. Ninguna opinión, ni ley, ni parlamento puede cambiar lo malo en bueno, ni lo que es un crimen en un supuesto derecho.

Argentina se está jugando en la cuestión de la defensa de la vida de sus niños por nacer mucho más de lo que se pueda imaginar.

Le pido a Dios que Argentina mantenga bien abiertos los ojos y que el camino de vuelta del aborto que están iniciando Estados Unidos y España, después de haber asesinado a cientos de miles de niños inocentes con el amparo asesino de sus propias leyes, se lo evite. Que Argentina no permita que las presiones de ideologías (y dinero para coimas) abortistas destruyan la cultura de la vida para transformarla en cultura de la muerte. ¿De qué le serviría ser campeona del mundo de fútbol si mata a sus propios hijos?

Más apoyo a la familia y menos aborto.

Gorrión.